Ni el sofocante calor andaluz pudo detener el ritmo. La Plaza de España vibró con la llegada de Ozuna, quien encabezó una jornada explosiva del Icónica Santalucía Sevilla Fest. Bajo un cielo abrasador que no dio tregua, el artista puertorriqueño ofreció un espectáculo electrizante, consolidando su lugar como uno de los referentes del reguetón mundial.
Más de 40 grados y aún así... fiesta total
Desde primeras horas de la tarde, los fans comenzaron a ocupar sus sitios. A pesar de que el mercurio superaba los 40 °C, el entusiasmo no decayó. Con gorras, abanicos y botellas de agua, el público resistió la canícula con una sola misión: ver a Ozuna en directo en Sevilla.
La jornada, bautizada como Big Sound Sevilla, fue un desfile de talento joven y energía urbana. El ambiente fue creciendo con cada actuación hasta llegar al gran clímax de la noche.
Una tarde de talentos que preparó el terreno
El escenario acogió desde temprano a artistas emergentes y consolidados:
- Gynebra abrió la tarde con un pop fresco y pegajoso, que animó a los primeros valientes que enfrentaban el calor.
- Henry Méndez desató la nostalgia y el baile con clásicos como “Rayos de sol”, arrancando los primeros coros multitudinarios.
- Mafalda Cardenal aportó emoción y sensibilidad con letras que resonaron especialmente entre el público joven.
- Abraham Mateo, ya convertido en una figura internacional, fue la antesala perfecta para Ozuna. Con temas como “Maníaca” y “Quiero decirte”, dejó el ambiente preparado para la gran actuación.
Ozuna: una estrella que no se apaga ni con el calor
Con puntualidad y una producción deslumbrante, Ozuna subió al escenario ante miles de personas que coreaban su nombre. Su presencia fue arrolladora desde el primer minuto. Comenzó con “Caramelo”, y le siguieron éxitos como “Se preparó”, “Dile que tú me quieres” y “El farsante”.
El artista conectó con el público desde el inicio. Saltó, bailó, sonrió y agradeció el cariño de Sevilla, prometiendo volver cada vez que lo llamen. Su carisma y dominio del escenario convirtieron la noche en un momento inolvidable para sus seguidores.
Entre el fuego y el ritmo, una noche que será historia
No importó el calor. No importó el sudor. Lo que quedó fue el recuerdo de una noche épica en la que la música urbana volvió a reinar en Sevilla. Entre luces, bases potentes y una audiencia entregada, Ozuna demostró por qué sigue siendo uno de los líderes indiscutibles del género.