En Bogotá, una ciudad que respira cultura y arte en cada rincón, nace Hernando Vergara Amaya, un artista plástico gráfico cuyas manos han forjado no solo imágenes, sino también lazos entre comunidades, generaciones y secciones del espacio público. Su trayectoria es un testimonio del poder transformador del arte, cuando es utilizado como una herramienta de inclusión y educación.
Desde su formación académica, Hernando ha cultivado un amplio espectro de conocimientos que abarcan la Pintura, el Diseño, la Psicopedagogía Artística y el Liderazgo Democrático. Estos estudios son la base sobre la cual construyó sus investigaciones en áreas como la Semiología, la Comunicación Visual, el Grabado y el Urbanismo. Tal amalgama de disciplinas refleja su visión holística del arte, como un fenómeno que no solo se contempla, sino que se vive y se comparte.
Uno de los aspectos más destacados de su obra es su compromiso con el espacio público. A través de múltiples proyectos que han involucrado tanto a entidades gubernamentales como a la comunidad local, Hernando ha buscado involucrar a los niños en la creación y mantenimiento de su entorno. Este enfoque no solo fomenta en ellos un sentido de pertenencia, sino que también despierta su interés por el cuidado del espacio que habitan. Los niños, que son el futuro de cualquier sociedad, son educados desde temprana edad en la importancia del arte y la cultura, entendiendo que ambos pueden ser poderosos instrumentos de cambio.
La labor comunitaria de Hernando Vergara A. se manifiesta en su capacidad organizativa para realizar actividades plásticas que trascienden fronteras culturales y geográficas. Su trabajo ha recibido reconocimiento tanto dentro como fuera de Colombia, consolidándose como una figura clave en el ámbito cultural del país. Al trascender el espacio académico y llegar a las comunidades, su labor se convierte en un acto de resistencia cultural, donde el arte se utiliza como vehículo para el diálogo y la cohesión social.
Como profesor de Artes Plásticas y Diseño Gráfico, Hernando no solo comparte su conocimiento, sino que también inspira a las nuevas generaciones de artistas. Les enseña a observar el mundo a través de una lente crítica, a valorar la historia, la identidad y el contexto social en el que se insertan. En su aula, el arte no se reduce a una técnica o un producto estético; se convierte en un medio para comprender la realidad, expresar emociones y contar historias.
Uno de los hitos significativos en la carrera de Hernando es su reconocimiento como diseñador y creador de más de cincuenta portadas de libros de renombrados autores latinoamericanos, como Gabriel García Márquez, Antoine de Saint-Exupéry, Rómulo Gallegos, Miguel Otero Silva, Isabel Allende y Pablo Neruda. Cada portada es una obra que dialoga con el texto, invitando al lector a sumergirse en el universo literario que representa. Esta faceta de su trabajo resalta no solo su habilidad artística, sino también su aguda sensibilidad hacia la narrativa y la comunicación visual, convirtiéndose en un puente entre la literatura y el arte gráfico.
Como creador del Proyecto Plástico, Pedagógico y Comunitario «Arte Peatonal», Hernando sigue explorando nuevas formas de interacción con el espacio urbano. Este proyecto se centra en transformar el entorno peatonal en una galería de arte abierta, donde cada paso que se da se convierte en un acto de apreciación estética y cultural. La idea de que el arte debe ser accesible para todos se convierte en una realidad tangible, donde las calles y plazas de la ciudad se convierten en escenarios vivos de creatividad y expresión colectiva.
La obra de Hernando Vergara Amaya. No se limita a las paredes de recintos artisticos o museos. Se ha exhibido en más de doce países, alcanzando una proyección internacional que lo ha conducido a lugares emblemáticos como el Museo de Arte Contemporáneo de Bogotá, el Museo Nacional de Colombia y el Museo Universidad de Antioquia en Medellín, así como a galerías y eventos de gran prestigio en Europa y América Latina. Su participación en certámenes internacionales, como el Certamen Internacional de Dibujo Joan Miró y la Bienal Gráfica de Maracaibo, ha elevado su estatus como artista y ha abierto puertas a un diálogo enriquecedor entre culturas.
Las distinciones que ha recibido a lo largo de su trayectoria son un reflejo del impacto que su obra ha tenido en el panorama artístico contemporáneo. Sus trabajos forman parte de importantes colecciones en museos y espacios privados en países tan diversos como Estados Unidos, Israel, Brasil, Suecia y México. A través de esta vasta red, su influencia se extiende más allá de las fronteras, llevando con él un mensaje de esperanza y renovación cultural.
En 2012, Hernando publicó «Historia Sin Tiempo», un homenaje a Gabriel García Márquez que celebra los treinta años de la entrega del Premio Nobel. Esta obra, que reúne noventa fotografías inéditas, se convierte en un testimonio vivo de la unión entre dos disciplinas que, aunque distintas, comparten un mismo lenguaje: el de la identidad y la memoria colectiva.
Lo que lo ha hecho merecedor de distinciones a nivel nacional e internacional. Su obra forma parte de las colecciones del Museo Rayo, Roldanillo, Valle; Museo de Arte Moderno en Cartagena y del Museo de Arte Contemporáneo de Bogotá, y de colecciones privadas en Colombia, Venezuela, Estados Unidos, Israel, España, Perú, México, Argentina, Brasil, Suecia y Universidad de Canterbury.
Por Edgard Award V.